Un paseo por la obra de grandes artistas.

sábado, 24 de octubre de 2015

MILENA STEFANOVA (1965) / MIS ESPALDAS ME CONTIENEN


  •  Casi estatuas de mujer pintadas en una postura de meditación y recogimiento. Sin embargo, esas criaturas muestran su interior sanguíneo, visceral, lingüístico, para hacer visible la tumescencia de su espíritu, la exaltación de su ser. No son cosas, son naturaleza y vida.


  •  Y se conciben, y así las procrea y percibe la búlgara STEFANOVA, como carne y espíritu, como silencio lleno, no vacío, como significado y significante, como símbolo y signo. Son ella misma, así lo espero, transmutada en sensualidad, pensamiento y fugacidad. 


  •  Pero además este esquematismo figurativo con flujos o fondos cromáticos claves en el desarrollo de sus obras, entraña un sentido conceptual respecto al destino finito de la existencia, una evolución presentida hacia su término, pues lo cierto y verdad es que el poder del arte va a zonas más profundas que toda racionalidad consciente.   

Los que besan les tiran piedras a sus monstruos. La tarea de
matar a la muerte cabe en una caja china / La pasión escribe
sitiada por la desdicha general.
(Juan Gelman)